MARCOS SASTRE
Nació en Montevideo en 1808. Se destacó como escritor, educador y fundador del Salón Literario.
Debido a la ocupación portuguesa, su familia se trasladó a Santa Fe, desde donde fue enviado a estudiar en el colegio Monserrat de Córdoba, donde se graduó.
Al finalizar la guerra con Brasil, regresó a Montevideo, allí fundó una escuela y publicó una obra para enseñanza de la lectura.
En 1830 se radicó en Buenos Aires. Estudió pintura con diversos artistas.
Abrió la LIBRERÍA ARGENTINA, en cuya trastienda empezó a funcionar el SALÓN LITERARIO, al que concurrían jóvenes interesados en cultura, política y progreso científico: Miguel CANÉ, Juan Bautista ALBERDI, Juan María GUTIERREZ, Esteban ECHEVERRÍA, Vicente Fidel LÓPEZ.
Sus tertulias se orientaban inicialmente a discutir sobre literatura, arte y moda, influidos por el auge del Romanticismo en Europa.
Poco a poco, se concentraron en temas políticos. En 1837, Echeverría fundó en el salón de la Librería Argentina la ASOCIACIÓN DE MAYO, cuyo ideario habría de ser decisivo para el derrocamiento de Rosas y la futura Organización constitucional.
Las reuniones resultaron sospechosas para la Sociedad Popular Restauradora, y la situación se volvió insostenible cuando se vieron enfrentados con el gobierno, sin proponérselo, a raíz del bloqueo naval francés al puerto de Buenos Aires.
Pese a las amenazas de La Mazorca, no huyó a Montevideo como algunos amigos. Pero la antipatía oficial y el cierre de las importaciones de libros franceses, causaron la quiebra de su librería.
Se retiró a San Fernando, donde abrió una escuela en 1842. Allí escribió el “TEMPE ARGENTINO”, su obra principal como naturalista autodidacta. Era un estudio más lírico que científico sobre la flora, la fauna y la geografía del Delta del Paraná, ilustrada con grabados hechos por él mismo. Toda una novedad en su tiempo.
El nombre evocaba a la región de la antigua Grecia.
En la obra proponía ideas y sugería proyectos para el desarrollo económico del Delta.
Perseguido por el gobierno, huyó a Entre Ríos donde en 1848 fundó el periódico “El Sudamericano”. Urquiza lo nombró Inspector general de escuelas y director del diario “El Federal”.
Después de la batalla de Caseros se instaló en Buenos Aires nuevamente, siendo nombrado director de la Biblioteca Pública. Por su simpatía con Urquiza, en 1853 fue separado del cargo.
Regresó a Entre Ríos, donde fue nombrado Inspector de escuelas de la Confederación Argentina.
Publicó un “Tratado de Ortografía” y otro de “Lecciones de Gramática”.
Después de la batalla de Pavón, trabajó en la Dirección de Escuelas de la Nación.
En 1865 fue director de la Escuela Normal de Paraná. Su último cargo público fue como integrante del Consejo Nacional de Educación.
Falleció en 1887, en Buenos Aires.
Por Gerardo Celemín